(A los soldados de plomo, instrumento del estado
contra el pueblo en lucha)
Hoy aprendí de cerca los pasos de la muerte
revestida de azules, torturas y metal
encarcelando aulas, lecciones y caminos
azotando a mansalva la espalda del futuro
entre oscuros relámpagos y varas de matar.
Pisoteaban las flores pintadas de mañana,
enlodando de huellas el camino al pasar
destrozando fragancias, pétalos y corolas
deshaciendo el abrazo que se tiende hacia el alba
y un torrente de culpas disparando al azar.
Levantaban murallas al amor cotidiano,
para prohibir el hambre, la sed, el agua y pan
borrando las palabras con que hablan las paredes
y las consignas buenas resumiendo el reclamo
de la gente que al alba comenzó a caminar.
Iban contra la risa regalada de flores,
contra el ritmo de plena que siempre ha de sonar
en las voces del pueblo que celebra en las calles
la lección solidaria del abrazo desnudo
que al tirano le aterra cuando se hace cantar.
Oye bien, aunque seas el brazo de la muerte,
y respondas del rico al más oscuro afán,
tal vez quiebres mi rostro pisoteado de calles
tal vez riegues el polvo con mi sudor y sangre
pero vencer la gente de mi pueblo: jamás.
Cuando la gente corra las calles libremente
floreciendo utopias de justicia y de pan
como dijera Julia: “incendiando pecados”,
destruyendo los templos de los dioses del miedo
entonces sera el tiempo para la libertad.
Hermoso y sentido poema!!!!!!!!! la lucha por la Independencia y la Libertad, en la flor del poema y del corazón a compartir , Roberto Romeo Di Vita
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